Osteoartritis canina. Abordaje multimodal
La artrosis canina u osteoartritis canina (O.A.) es una enfermedad crónica degenerativa que afecta al conjunto de la articulación.
A diferencia de lo que ocurre en medicina humana la Osteoartritis en muy raras ocasiones responde a una causa primaria (edad y desgaste articular) sino que responde a una causa secundaria como pueden ser traumatismos, lesiones articulares y alteraciones musculoesqueléticas como displasia de cadera, hombro y codo; existen factores que favorecen y pueden agravar la evolución de la enfermedad como son la edad, sobrepeso, factores genéticos como la raza, alimentación, etc.
La osteoartritis afecta a uno de cada cinco perros mayores de 1 año. Actualmente se baraja con un aumento de esta incidencia hasta el 25%.
Las alteraciones que se presentan en la articulación son:
- Cartílago: perdida de proteoglicanos, lesiones en el colágeno, modificación de su estructura hasta su desaparición produciéndose la exposición del hueso subcondral.
- Líquido articular: perdida de su viscosidad y función debido a la degradación y pérdida de ácido hialurónico y otros proteoglicanos.
- Membrana sinovial: inflamación, fibrosis, síntesis anormal de ácido hialurónico.
- Cápsula articular: Engrosamiento capsular y estrechamiento espacio articular
- Hueso: esclerosis, destrucción ,remodelación ósea y formación de osteofitos.
- Vasos epi y metaepifisarios: congestión vascular, depósitos de fibrina, lípidos y colesterol.
Los signos clínicos de la O.A. son el dolor, la cojera, rigidez y la pérdida de masa muscular.
El tratamiento de la osteoartritis debe ir encaminado a aliviar el dolor en el perro y frenar o enlentecer la degeneración articular. El tratamiento ha de ser multimodal lo que incluye distintos enfoques: conservador, quirúrgico o una combinación de ambos.
El manejo del peso es fundamental, el sobrepeso por si mismo supone una sobrecarga en las articulaciones además los perros con sobrepeso se encuentran en una situación de inflamación crónica de bajo grado liberando el tejido adiposo leptinas que empeorarán las alteraciones y signos de la osteoartrosis.
La modificación del ejercicio con ejercicios de bajo impacto y la fisioterapia también son aspectos clave en el manejo de la Osteoartrosis.
La terapia farmacológica también ha de ser multimodal y para conseguir nuestros objetivos podemos utilizar diferentes fármacos y complementos nutricionales:
- Antiinflamatorios no esteroideos
- Ácidos grasos Omega-3 (EPA y DHA)
- Analgésicos:
- Condroprotectores
El tratamiento quirúrgico también puede ser indicado, y en ocasiones puede ser la mejor opción.
Con el fin de adaptarse a las diferentes necesidades en la terapia multimodal de la osteoartrosis Karizoo ofrece al veterinario clínico de animales de compañía diferentes soluciones:
Loxicom: meloxicam inyectable y suspensión oral. AINE con acción antiinflamatoria y analgésica. Presentaciones adaptadas a los diferentes pesos.
Osteopen: Pentosano polisulfato sódico. AINE con acción antiinflamatoria, analgésica, acción inhibidora de metaloproteasas, acción antitrombótica y antioxidante.
K-Omega 3 joint care : Ácidos grasos Omega 3: EPA(240 mg) y DHA (120 mg) Colágeno tipo II y Selenio. Antiinflamatorio, analgésico y antioxidante.
Bupaq: Buprenorfina. Analgésico.
Ketamidor: Ketamina. Analgésico.
Lidor: Lidocaina. Anestésico local.